Dinero sin esfuerzo, ¿estás preparado?

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“No se preocupe por lo que van a hacer los mercados. Preocúpese sólo por cuál será su respuesta ante el movimiento de los mercados.” Michael Carr.

Imagine un hombre en plena calle Serrano, bien arreglado y vestido con un letrero colgado de su cuello que dice: “Pídame todo el dinero que necesite. Dinero gratis por un día”. El hombre lleva una cantidad considerable de dinero en efectivo, y piensa dárselo a todo aquel que se lo pida. Interesante, ¿no es así? Si asumimos que ese día la calle está muy transitada y la mayoría de la gente puede leer el letrero. ¿Qué piensa usted que pasara? ¿Cuántas personas le pedirán dinero? ¿Crees que se le agotará?

Este experimento, con algunas variaciones, se realizó hace unos 30 años en un show televisivo en la avenida de Michigan (Chicago) y solo una persona se paró  emocionada y le pidió una cuarta parte de lo que realmente necesitaba. Nadie más se acercó al hombre, que finalmente, frustrado porque la gente no reaccionó de la forma en que él esperaba comenzó a gritar, “¿Quieren dinero? ¡Por favor cojan mi dinero!” Todas las personas caminaban alrededor de él como si no existiera e incluso se apartaban de su camino para evitarlo. ¿Por qué nadie (excepto la persona que tomo la cuarta parte) pedía el dinero? ¿Piensa que en aquella calle de nivel socioeconómico medio-alto no preocupa el dinero?  Imposible puesto que todos, sea cual sea nuestro nivel socioeconómico nos dedicamos de una forma u otra la mayor parte de nuestras vidas a buscarlo. Alguien nos ofrece una experiencia que a todos nos encantaría tener y sin embargo no hacemos lo que se espera que hagamos.

El problema proviene de nuestras creencias (los conceptos que tenemos acerca de cómo funciona el mundo). La mayoría de nosotros pensamos que el dinero gratis no existe, entonces ¿cómo concilia alguien esta contradicción por mucho que un letrero nos cuente lo contrario? Sencillamente la mayoría tacharemos a este señor de loco, ¿qué otra explicación podría haber para tan extraño comportamiento si, en realidad, el dinero gratis no existe? El proceso de razonamiento sería algo parecido a lo siguiente: “Todo el mundo sabe que conseguir dinero sin condiciones rara vez sucede. Y mucho menos de un extraño sobre una de las calles más concurridas de la ciudad. De hecho, si el hombre realmente regalaba el dinero, podría ser atacado y poner en peligro su vida. Él debe estar loco. Yo mejor me quito de su camino y evito un problema ¿quién sabe lo que tiene en mente?”. Note como el proceso de pensamiento descrito es compatible con la creencia de que “el dinero gratis no existe”.

Veamos un ejemplo hipotético de alguien que cree que el “dinero gratis no existe”, pero esta intrigado y curiosea acercándose al hombre y olvidando  momentáneamente su convicción de que el “dinero gratis no existe”. Se acerca a él y le dice: “Dame cien euros”. El hombre rápidamente saca de su bolsillo un billete de cien euros y se lo entrega. ¿Qué pasa ahora? Seguramente llamaremos a todos nuestros familiares comentándoles la anécdota y felices por el descubrimiento hasta que uno de ellos nos haga pensar en que desperdiciamos la oportunidad pidiendo tan poco. En ese momento lo que era felicidad se desvanecerá valorando el dinero que dejamos sobre la mesa. ¿Cuántas veces volverá a ocurrir esto en nuestras vidas?

Recuerde las frases que escuchamos una y otra vez a nuestros padres, “El dinero no crece de los árboles. Eso no podemos pagarlo. ¿Qué te crees que soy rico?…”

Desde que nacemos crecemos con una creencia de que conseguir dinero es muy duro y difícil. Probablemente esta creencia este cargada negativamente desde nuestra infancia. Por tanto, estaríamos tan extrañados ante la posibilidad que se nos brinda “un hombre regalando dinero” que buscaríamos cualquier confirmación por muy rara que fuera para seguir pensando que eso no es verdad.

Le damos demasiado valor a nuestras creencias,  y son las encargadas de dibujarnos el mundo que percibimos. Entiendes ahora porque es tan sencillo agarrarse a la idea de que nuestro sistema de trading dejo de funcionar o que nunca lo hizo, la mayoría no supera un drawdown porque les falta la creencia de que realmente funciona, les falta la fe para defenderlo contra viento y marea. ¿Realmente estas preparado para confiar en una nueva realidad y aspirar al siguiente nivel? Cuidado con lo que dices porque tus palabras, tus pensamientos y sentimientos serán realmente lo que eres.

Buen trading amigos!

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