Los beneficios de un egoísmo inteligente

INFORME BURSATIL

“Los más valiosos seres humanos son aquellos que se han realizado y su más alta cualidad es ser independientes de la buena opinión de los demás”. Abraham Maslow

Desde que se produce el desarrollo de la moral desde la infancia hasta que nos hacemos adultos la moral y las normas sociales empiezan a hacer mella en nosotros pudiendo producirse desde distintas etapas donde se van formando nuestro caracter y forma de actuar donde todos los principios de la ética se basan en buscar el bien comun. Sin embargo, el pensamiento humano puede verse condicionado por la siguiente frase, tal y como decía Hobbes, “El hombre es egoista por naturaleza”.

De hecho siguiente esta afirmación podemos encontrar multitud de ejemplos que hacen referencia al egoismo humano que se produce en determinadas situaciones que aparentemente son altruistas.

De hecho el pasado día 3 de agosto hubo una promoción en un parque de atracciones en México, este consistía en que todos aquellos que llevasen a un perro adoptado a las instalaciones tendrían una entrada gratis.

De este modo podemos observar como esta empresa buscaba su propio beneficio, ya que al llevar a una mascota la cual habian abandonado las calles siendo esto un acto completamente altruista, dejaban una entrada gratis, pero cual es el objetivo de esto:

Atraer clientes, de esta forma a pesar de regalar una entrada lo más normal es que dentro del recinto se consuma y que además se venga acompañado teniendo en este caso que comprar una entrada.

De esta manera lo que podría suponer un coste para la compañía se ha convertido en una inversion de marketing.

¿Egoísmo benéfico o inteligente?
Al igual que este empresario, creo en el egoísmo inteligente. Cuanto más miramos en nuestro interés individual, mejores son los resultados para todos en el largo plazo. El egoísmo inteligente va más allá de la satisfacción inmediata, el impulso o la costumbre. Se trata de una forma estratégica de actuar y de comportarse con la vista siempre puesta en el momento de después y que a veces puede dar beneficios sorprendentes en 10 segundos o en 1 hora, en otras ocasiones la recompensa tarda años en materializarse aunque resulta evidente.

En las finanzas personales, llegar a un equilibrio egoísta inteligente entre los ingresos, los gastos y la esperanza de vida van mucho más allá de la economía familiar, es una forma inusual y moderna de entender la vida (y la muerte). Si el dinero que acumulamos en la vida no sirve para comprar tiempo libre y si además, como consecuencia, dejamos casi todo lo ‘no disfrutado’ para nuestros descendientes, entonces ellos también se perderán la oportunidad de aprender este otro modo de vivir la vida de los mejores maestros posibles, sus padres.

El gen egoísta

Sin ir más lejos, “El gen egoísta” es uno de los libros recomendados por Charlie Munger, socio de Warren Buffet, una de las personas tras Benjamín Graham que más han influido en la filosofía de inversión de Buffet.  A pesar de ser un libro con bases más biológicas que económicas, gira en torno a la idea de que el egoísmo explica la probabilidad de que un gen sea capaz de adecuarse al medio.

“Si un animal pequeño baja a una charca a beber, aumenta su riesgo de ser devorado por los predadores que viven de acechar a sus presas en los alrededores de los charcos. Si no va hasta donde se encuentra el agua morirá finalmente de sed. Existen riesgos en ambos casos y debe tomar la decisión que tienda a prolongar al máximo las posibilidades de supervivencia a largo plazo de sus genes. Quizá la mejor política sea posponer el acto de aplacar la sed hasta que se encuentre muy sediento, luego bajar y beber bastante como para que dicha necesidad tarde en presentarse de nuevo. De tal forma se reduce el número de visitas a la charca, pero, por otra parte, debe dejar transcurrir bastante tiempo con la cabeza baja cuando finalmente se decide a beber.

Como otra alternativa, tal vez la mejor jugada podría ser beber poco y seguido, arrebatando rápidos sorbos de agua al cruzar corriendo la charca. Determinar cuál es la mejor estrategia de juego depende de todo tipo de factores complejos, de los cuales uno de los más importantes es el hábito de caza de los predadores, el cual ha evolucionado para ser, desde su punto de vista, de una máxima eficiencia. Debe haber alguna manera de calibrar las posibilidades. Pero, por supuesto, no debemos pensar que los animales efectúan los cálculos conscientemente. Todo lo que necesitamos creer es que aquellos individuos cuyos genes fabricaron cerebros de tal forma que tienden a juzgar correctamente tendrán, como resultado de ello, mayores probabilidades de sobrevivir y, por lo tanto, de propagar aquellos mismos genes.”

Podemos llevar la metáfora del juego un poco más lejos. Un jugador debe pensar en tres factores principales: las apuestas, las probabilidades y el premio. Si el premio es muy grande, el jugador estará dispuesto a arriesgar una apuesta considerable. Un jugador que arriesga todo lo que tiene a una sola jugada tiene posibilidades de ganar una cifra muy alta. Es probable, también, que pierda una cantidad apreciable, pero por termino medio, los jugadores que arriesgan altas apuestas no terminan mejor ni peor que otros jugadores que optan a pequeñas ganancias mediante apuestas bajas. Una comparación análoga se puede hacer entre aquellos que especulan en la bolsa y aquellos que aseguran en sus inversiones.

En cierto sentido la bolsa de valores constituye una analogía mejor que un casino, ya que los casinos son manipulados deliberadamente en favor de su banca (lo que significa, estrictamente hablando, que los jugadores de altas apuestas terminaran, como promedio, más pobres que aquellos jugadores cuyas apuestas son bajas; y estos últimos terminaran siendo más pobres que aquellos que no juegan en absoluto. Pero ello se debe a una razón al margen de nuestra hipótesis).Pasando por alto este punto, las posiciones de ambos jugadores parecen razonables.

Existen animales jugadores que hacen apuestas altas y otros que adoptan un juego más conservador. En el capítulo IX veremos que, a menudo, es posible representar a los machos como jugadores de altas apuestas que afrontan un elevado riesgo, y a las hembras como a inversoras seguras…

Uno de los medios que tienen los genes para resolver el problema relativo a las predicciones en medios ambiente impredecible es construir una capacidad de aprendizaje.

En este caso el programa puede tomar la forma de las siguientes instrucciones dadas a la máquina de supervivencia: “He aquí una lista de cosas definidas como recompensas: sabor dulce en la boca, orgasmo, temperatura suave, niño sonriente. Y he aquí una lista de cosas desagradables: diversos tipos de dolor, nauseas, estómago vacío, niño gritando.

Si da la casualidad de que haces algo que va seguido por una de las cosas desagradable, no, la repitas pero, por otra parte,  repite cualquier cosa que vaya seguida por una de las cosas agradables.”

La ventaja de este tipo de programación es que reduce, considerablemente, el número de reglas detalladas que debían ser especificas en el programa original; y es también apta para afrontar los cambios en el medio ambiente que no pudieron ser pronosticados detalladamente.

Por otro lado, ciertas predicciones tienen que ser hechas todavía. Según nuestro ejemplo, los genes predicen que el dulce sabor en la boca y el orgasmo serán “buenos” en el sentido de que comer azúcar y copular es probable que beneficie a la supervivencia de los genes. “


En resumen, el egoísmo es común a todas las especies y aunque resulte obsceno, es hasta necesario para nuestra evolución. La clave está en desplegarlo con sutileza, astucia y sin la necesidad de conseguir los objetivos de inmediato, porque lentamente y con inteligencia la gratificación perdura en el tiempo, se retroalimenta y se multiplica. Por tanto sean egoístas, pero sean inteligentes.

Si deseas leer un poco más acerca de psicología de trading y motivación para emprender un negocio tan duro como este, puedes echar un vistazo al siguiente artículo.

Buen trading amigos!

 

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *